Desde pequeña, siempre me llamó la atención la metafísica y todo aquello que se relacionara con saber, entender y ver más allá de nuestra aparente realidad. Recientemente he estado leyendo y sobre todo llevando a la práctica ciertos principios metafísicos. Por eso hoy quiero compartir contigo las 7 leyes universales y cómo hacer que funcionen a nuestro favor.

Las 7 Leyes Universales

Me gustaría advertir que estas leyes funcionan creas en ellas o no, sepas si existen o no. Según mi creencia, existe una inteligencia divina que es y puede todo, entonces la perfección y la armonía en el universo, solo se pueden llevar a cabo siempre que existan leyes y se cumplan. Así pues, existen las leyes universales que todo o controlan y sin darnos cuenta, estamos conectados a ellas.

Saber cómo funcionan estas leyes nos permite utilizarlas a nuestro favor y asimismo obtener los mayores beneficios espirituales, mentales y físicos. En mi experiencia personal, te puedo decir que conocer, comprender e integrar estas leyes, nos da un gran poder creativo, nos convierte en mini dioses capaces de crear nuestras circunstancias y nuestra vida a nuestro favor. Mi objetivo es darte a conocer las leyes y en adición darte ejemplos de cómo utilizarlas a tu favor.

Ley del Mentalismo.

Esta ley nos indica que todo en el universo es mente. La mente es una energía inmutable e infinita capaz de crear. Esta mente universal, inteligencia divina o mejor conocida como el todo lo que es (aquí puedes llamarlo como tu creencia particular lo indique) en mi caso, yo le digo Dios; lo rige todo y como buenos hijos nos otorgó el poder de la mente (pensamiento) para crear de igual manera que él. No me mal interpretes, tal vez no seamos capaces de crear un planeta y convertirnos en sus dioses; sin embargo, sí somos capaces de crear nuestras vidas y propias circunstancias utilizando esta ley.

  • Cómo utilizar la Ley del Mentalismo: La mente o el pensamiento, es el sistema operativo que nos permite interactuar con nuestra realidad, si modificamos nuestros pensamientos modificaremos nuestra realidad. Nosotros vemos o percibimos el mundo de la manera en que pensamos; es decir, según nuestras creencias, experiencias, miedos y también nos dejamos llevar por las creencias colectivas; dependiendo de este tipo de pensamiento, generamos un sentimiento y en conjunto con nuestras acciones, creamos o manifestamos nuestra realidad. Nos conviene liberarnos de creencias limitantes y construir un sistema de pensamientos positivos que funcionen a nuestro favor. Ejemplo: si tienes la creencia de que cada vez que te mojas con agua de lluvia te resfrías, seguramente esa ha sido la realidad que construiste hasta ahora con tu pensamiento y creencia; de ahora en adelante puedes pensar y creer que tu cuerpo es súper saludable y ni el agua de lluvia te puede afectar. ¿Sí lo ves?

Ley de Correspondencia.

Nos indica que existe una correspondencia entre los tres planos del hombre (espiritual, mental y físico); la mejor manera de explicarlo es con las siguientes expresiones: “así como es arriba es abajo” “así como es adentro es afuera” y así como pensamos sentimos y accionamos; por esto la importancia de tener pensamientos positivos, ya que nos harán sentir bien y si actuamos en concordancia pues mejor.

  • Cómo utilizar la Ley de la Correspondencia: Seguramente has leído o escuchado que debes tener pensamientos positivos, pero ¿por qué? es muy sencillo, porque los pensamientos nos hacen sentir, cada vez que pensamos nuestro cuerpo reacciona, entonces si logramos domar nuestra mente y nos enfocamos en pensamientos positivos estos nos generarán bienestar y ese bienestar se verá reflejado afuera en nuestro cuerpo físico. Si quieres ver un cambio exterior o allí afuera en tu vida, primero deberás hacer los cambios adentro en tu mente y sentimientos. ¿Qué tal te suena esto?

Ley de la Vibración.

Nuestro mundo físico es al mismo tiempo materia y vibración. Todo emite energía en mayor o menor grado y en distintas frecuencias, pero energía al fin. La energía tiene la particularidad de que siempre está en movimiento, nada es estático. Todo lo que percibimos con nuestros sentidos viene de la vibración, los pensamiento que emitimos son vibración y los sentimientos que tenemos son vibración. Entonces, al experimentar amor estamos emitiendo la más alta vibración mientras que cuando sentimos odio, estamos emitiendo la más baja de las vibraciones. Según esta ley, las energías similares son atraídas, por eso será sumamente importante cuidar la energía que estamos proyectando al universo ya que por acción de esta ley atraeremos energías similares.

  • Cómo utilizar la Ley de la Vibración: Al estar conscientes de la energía que irradiamos, procuraremos enfocar y equilibrar nuestros pensamientos y sentimientos en una frecuencia alta que nos traiga beneficios. Una de las mejores formas de elevar nuestra frecuencia vibratoria es meditando, tómate unos minutos para conectar contigo mismo, calmarte y comenzar a sentir en positivo.

Ley de la Polaridad.

Todo es dual, todo tiene su opuesto y semejante, esta ley indica que los puestos son iguales en naturaleza pero en distinto grado. Amor/odio, paz/guerra, verdad/mentira todos son variaciones de lo mismo pero en diferente vibración. Como seres duales, nosotros poseemos luces y sombras la tarea será integrarlas y aceptarlas en nuestra vida.

  • Cómo utilizar la Ley de la Polaridad: Esta ley es mutable; es decir, podemos cambiarla. Si nos encontramos en uno de los extremos, con solo tomar la determinación de cambiar y hacer ajustes en nuestra vida, nos podemos mover al otro polo y solo será necesario ajustar nuestra vibración. Muchas veces cuando se nos presentan adversidades, podemos sentir rabia, dolor y tristeza y eso está bien, experimentar estos sentimientos forman parte de la vida; sin embargo, permanecer mucho tiempo en esas vibraciones es nocivo para nuestra salud, procura salir de ellas tan pronto como puedas, enfócate en ver el lado positivo y la enseñanzas que te deja.

Ley del Ritmo.

En el universo todo se mueve como un péndulo, es decir, todo viene y va, todo sube y baja, todo fluye y refluye, inhalar y exhalar, vivir y morir. Todo pertenece al ritmo o círculo de la vida.

  • Cómo utilizar la Ley del Ritmo: Es importante comprender que nuestra vida tiene su propio ritmo y debemos evitar compararnos con otros. Cada quien tendrá un nivel de consciencia en determinado y hará las cosas a su ritmo, nosotros solo podemos observar sin juicio alguno. Para utilizarla en nuestra vida, deberemos enfocarnos en lo positivo pase lo que pase y que el movimiento en sentido contrario del péndulo sea menos negativo.

Ley de Causa y Efecto.

“Toda causa tiene su efecto y todo efecto tiene su causa”, esta ley también es conocida como ley de Karma, todo lo que hacemos tiene consecuencias y siempre vuelve a nosotros. De esta manera, el azar y la casualidad no existen, lo único realmente verdadero es la “CAUSALIDAD”. Cuando algo sucede en nuestras vidas tiene que ver con aquello que hemos proyectado en pensamientos, palabras y acciones. Así pues, la suerte tampoco existe, ese es un concepto casi mágico que hemos construido para determinar aquellas cosas “buenas” que nos pasan; sin embargo, según esta ley nosotros somos los grandes creadores de todas las situaciones en nuestra vida.

  • Cómo utilizar la Ley de Causa y Efecto: simple, piensa + siente + actúa siempre bien y en orden divino. Lo que siembras cosechas. Procura tener pensamientos positivos, de bienestar y grandeza para ti, siéntelos y actúa en concordancia con gratitud y verás manifestada “la suerte” en tu vida.

Ley de Generación.

“Todo tiene su principio masculino y femenino” De la unión de estos dos polos, surge la creación. La energía masculina consiste en sembrar la semilla, en atraer y estimular; mientras que la energía femenina consiste es recibir, germinar y reproducir.

  • Cómo utilizar la Ley de Generación: Integrar ambas energías de manera equilibrada en nuestras vidas es primordial, recuerda que para crear se necesitan ambas.

Listo, ya tienes las herramientas para “Crear” y “Manifestar” tus pensamientos en todo aquello que te propongas. De hecho, te reto a que cuestiones todo lo que digo, pero eso sí experiméntalo, pon en práctica las 7 leyes universales primero con verdadera atención y cuando obtengas los resultados ya veremos si te mantienes incrédulo o cambias tu opinión. ¿Te atreves a regirte con las 7 leyes universales? ¡Saludos!