El escozor, picazón o irritación de los ojos es un problema bastante común que puede afectar a cualquiera al menos una vez; ya que, los ojos son un órgano muy sensible que además se encuentra expuesto a múltiples agentes irritantes. Por lo tanto, es necesario conocer bien cuales son las causas del problema para lograr atacarlo; debido a esto, hablaremos sobre cómo aliviar el escozor de los ojos y cuándo es prudente acudir a ayuda médica ante este problema.

¿Por qué se irritan los ojos?

Como hemos mencionado, los ojos son una de las estructuras orgánicas que se encuentra más expuesta al ambiente; puesto que, pasan una gran cantidad de tiempo abiertos y en constante movimiento. Razón por la cual, a través del aire pueden entrar cualquier tipo de sustancias e incluso microorganismos que afectan su función. En general, la irritación ocular o prurito ocular se debe a la inflamación que se produce en el; siendo las principales causas del problema las siguientes:

Contacto con sustancias irritantes

A todos alguna vez nos ha pasado que algún químico como el jabón de baño, champú o el protector solar, entra accidentalmente en los ojos; lo cual, inmediatamente produce una sensación de ardor casi insoportable que debe corregirse rápidamente. En general, una de las principales causas de escozor en los ojos se debe a este tipo de accidentes; que, además, generan esta sensación por tiempo prolongado, debido a la memoria nerviosa que poseen los ojos.

Alergias estacionales

Por otra parte, tenemos entre las causas comunes de irritación de los ojos, las llamadas alergias estacionales; en las cuales, existe una mayor cantidad de sustancias irritantes en el ambiente, es decir, que circulan por el aire. Estas pueden ser el polen de las flores en primavera, el exceso de polvo e incluso la falta de humedad; en estos casos, suelen emplearse soluciones estériles como lágrimas artificiales para aliviarlo, aunque el oftalmólogo debe evaluar la causa.

Alergias de larga data

En este caso, nos referimos a los cuadros alérgicos que no dependen de las estaciones del año, quiere decir, que siempre están presentes. Aunque cueste creerlo, esto es mucho más común de lo que podría pensarse; siendo la principal de estas alergias la causada por el polvo, seguida del moho, caspa de mascotas, el humo, entre otros. Para estos casos, el médico especialista se reserva un tratamiento especial para aliviar esto síntomas correctamente.

Síndrome de ojo seco

El síndrome de ojo seco, como indica su nombre, se trata de una hidratación y lubricación insuficiente de los ojos; la cual, genera que se produzca el escozor típico al igual que sensación de pesadez, cansancio ocular, entre otros. Este síndrome tiene varias causas, puede ser debido a insuficiencia de la glándula lagrimal; quiere decir, que no se segrega suficiente agua para la lubricación de la superficie ocular.

Por otra parte, también existe el síndrome de ojo seco causado por la secreción insuficiente del componente oleoso de las lágrimas; el cual, se encarga de evitar que se evapore rápidamente este líquido de lubricación y proteja la superficie. En este caso, las responsables son las glándulas de Meibomio, que se encargan de este componente de las lágrimas.

Cabe destacar, que las lágrimas se componen de agua, lípidos y mucina o moco, estos tres componentes indispensables para la buena lubricación. En general, esta afección se trata con lágrimas artificiales aplicadas constantemente.

Uso de lentes de contacto

Los lentes de contacto son una herramienta maravillosa para recuperar la buena visión y mantener la estética. Sin embargo, tienen un gran potencial para causar irritación ocular que puede incluso evolucionar a infecciones. Principalmente, esto sucede por una mala manipulación de los mismos y el uso inadecuado del líquido lubricante y de limpieza; así como también, el uso de lentillas de mala calidad que causan reacciones alérgicas y son rechazados.

En caso de ser usuario de lentes de contacto, la irritación puede deberse a que no se encuentren bien lubricados o limpios; así como también, que presentes alergia al líquido que estás empleando en ese momento. Si el problema es frecuente, puedes probar empleando lentillas descartables de uso diario, así evitas riesgo de contaminación y evitas la molesta irritación.

Infecciones

Gracias a la exposición ambientes de los globos oculares, estos son constantemente atacados por microorganismos; sobre todo, aquellos que pueden sobrevivir sin problema en el agua, uno de los principales vectores que los lleva a los ojos. En concreto, existen muchas infecciones como uveítis, blefaritis, queratitis, úlceras corneales, conjuntivitis y más. Sin embargo, estas se acompañan de otras molestias además del ardor que inmediatamente despiertan alarmas; aunque en fases iniciales pueden confundirse.

Es importante señalar, que algunas gotas oculares para aliviar la irritación debida a alergias, hacen a los ojos más propensos a infecciones; mayormente, aquellas que se componen de esteroides que suprimen la actuación del sistema inmune en la zona. Lo cual, disminuye la liberación de histamina, principal agente proinflamatorio que se encuentra en las alergias; pero, en consecuencia, los ojos tienen las defensas disminuidas y son susceptibles a microorganismos.

Agotamiento

Sin duda alguna, otra de las causas de irritación ocular es el agotamiento, es decir, la falta de descanso de la visión. Lo cual, se ha convertido en un problema sumamente común debido al uso indiscriminado de aparatos electrónicos; es decir, móviles, ordenadores, televisores, entre muchos otros elementos.

En concreto, las glándulas responsables de la lubricación ocular, pueden estresarse y disminuir su secreción; debido a esto, es necesario el descanso mediante el sueño, para que solo deban generar el mínimo y recuperen su capacidad.

¿Cómo aliviar el escozor de los ojos?

Ahora bien, una vez comentadas todas las causas más comunes (Existen muchas más) es posible hablar de cómo aliviarla. Cabe destacar, que esto dependerá directamente de la causa de la irritación pues existen muchos tratamientos. En primer lugar, si la irritación se debe al contacto con sustancias irritantes, lo principal que debe hacerse es eliminarlas; para ello, se puede emplear lágrimas artificiales, solución 0.9% o incluso agua corriente, teniendo en cuenta que esta última no es estéril (existe riesgo de infección).

Este lavado ocular debe hacerse con abundante líquido para eliminar la mayor cantidad de esta sustancia de inmediato; por supuesto, luego de hacerlo debe acudir al médico especialista de inmediato para su evaluación. Debido a que, algunas de estas sustancias pueden causar incluso quemaduras que deben tratarse. Por otra parte, en el caso de las alergias estacionales, lo mejor es evitar a estos alergenos, el uso de lentes puede colaborar.

Si se trata del síndrome de ojo seco o alguna alergia de larga data, es indispensable acudir a atención médica oportuna; puesto que, se debe indicar un tratamiento basado en gotas que pueda corregir estos problemas. Aunque, en cualquier caso, los ojos son órganos tan delicados, que es muy recomendable acudir a atención médica en todos los casos.

¿Cuándo acudir al médico rápidamente?

El ardor, escozor o irritación en los ojos suele ser tan solo uno de los síntomas que acompañan a las infecciones; algunas de ellas, son muy contagiosas, por lo que pueden afectar a toda la familia o amigos que entren en contacto. Por ende, si se observan otros síntomas como dolor, visualización de partículas u objetos en el campo visual; hipersensibilidad a la luz, visión borrosa o doble e incluso pérdida de la misma, la atención médica debe ser con carácter de urgencia.

Como mencionamos, existen muchas formas de infección en los ojos que pueden ser muy graves, como por ejemplo las úlceras corneales; al igual que las celulitis orbitarias, ante esto, la atención oportuna es la clave para conservar la visión. Ya que, pueden verse afectados estos órganos de forma permanente debido a la acción de los microrganismos infectantes.

En conclusión, para saber cómo aliviar el escozor de los ojos es necesario conocer la causa directa del problema; como mencionamos, existen muchas causas posibles e incluso hay muchas más de las señaladas anteriormente. Sin embargo, estas son las más comunes y que pueden manejarse desde casa o con ayuda de un profesional. En cualquier caso, al tratarse de órganos tan delicados, la atención y opinión médica siempre es recomendada.