El liderazgo es una característica que siempre ha estado presente en nuestra sociedad, aquellos que poseen la competencia del liderazgo verdadero, serán cotizados en las mejores empresas para dirigir puestos de confianza, serán los mejores emprendedores, serán los políticos que mejores gestiones de trabajo desarrollen e incluso serán los que mejor desempeñen sus planes personales de vida. El liderazgo es una competencia o habilidad fundamental para nuestro crecimiento personal. Por eso hoy estaremos hablando del liderazgo y cómo podemos convertirnos en un buen líder.

Es en el ámbito empresarial es en dónde con más frecuencia se hacen notar las competencias de un líder; el capital humano es uno de los factores más importantes y hacer una buena selección de este capital con las mejores aptitudes es crucial para el éxito; sin embargo, también será clave la presencia de un líder que sepa pulir el potencial de su equipo de trabajo. Un líder, es aquella persona que orientará y coordinará el trabajo de cada miembro del equipo con el fin de cumplir metas y objetivos propuestos; sin embargo, existen varios estilos de liderazgo, veamos cuáles son.

Características de un Buen Líder

Un buen líder nace, pero también se hace. Existen dos características principales que todo líder debe poseer, aptitud y actitud. La primera tiene que ver con todos los conocimientos que se necesitan para desempeñar un cargo y la segunda con un comportamiento adecuado y asertivo. Si bien es cierto que una buena actitud se puede desarrollar, esta forma parte de la personalidad individual y será necesario contar con ciertas habilidades que permitan desarrollarnos como líderes. Toma nota de las cualidades.

Escucha.

Es hora de hablar  menos y escuchar más, es una excelente oportunidad para recibir la retro-alimentación de tu equipo de trabajo.

Ser escuchado te hace sentir valorado e involucrado en el proceso de toma de decisiones. Por eso un buen líder debe escuchar a su equipo para conseguir mejores resultados y mayor motivación.

Cree en los Miembros de Su Equipo.

Confía en las capacidades de tu equipo y déjales saber qué crees en ellos. Es importante que como líder contrates a las personas correctas. Asegúrate de contratar a personas que creas tienen la capacidad suficiente para hacer bien el trabajo, confía en ellos y hazle saber que crees en sus capacidades y su potencial.

Inspira.

Conviértete en una fuente de inspiración y modelo a seguir. Inspira a tu equipo ofreciéndoles el ambiente laboral adecuado, abriendo espacios para comunicarse efectivamente, escuchando sus opiniones y confiando en sus criterios.

Comparte tus Conocimientos.

El conocimiento es poder y cuando se comparte es aún más valioso. Compartir conocimiento incrementará el rendimiento del equipo además de hacerlos crecer como profesionales.

Los empleados saben apreciar un líder que se toma el tiempo de enseñarlos, desafiarlos y hacerlos crecer.

Sé un Ejemplo a Seguir.

En todos los aspectos que te puedas imaginar, las acciones dicen más que mil palabras. Un buen Líder entiende que solo con el ejemplo puede crear un equipo de trabajo orientado al logro y con objetivos claros.

Conoce a tu Equipo.

Dedica tiempo a conocer verdaderamente a cada individuo de tu equipo, conoce sus aspiraciones, metas personales y más.

A medida que vas conociendo a tu equipo y sus aspiraciones, vas consiguiendo los mejores resultados individuales. La traducción de esta mejora será un resultado de equipo muy positivo, que permitirá a la empresa llegar más lejos.

Incentiva la Participación.

Déjale saber a tu equipo que su opinión y aportes son importantes, un buen líder premia la participación activa de su equipo.

La participación activa sirve para motivar a los empleados, pero también para que el líder se involucre en cada área y aprenda más de la mano de sus empleados.

Reconoce los Logros.

Reconoce y agradece los aportes individuales y colectivos de tu equipo. Nada de llevarse el crédito como jefe cuando el logro es grupal.

Una buena forma de medir los logros, es con una evaluación de rendimiento. Con esta evaluación, se podrán establecer objetivos claros a los empleados y comprobar si han sido alcanzados y cómo ha sido el rendimiento individual y grupal.

Motiva a su Equipo.

Un buen líder conoce y sabe cómo motivar a su equipo. Se puede llegar a creer que el mejor incentivo es el dinero, pero no siempre es así. Muchas veces una felicitación en público o un celebración son igual de valiosas.

Inteligencia Emocional.

Un buen líder hace uso eficiente de sus emociones así como de la comunicación asertiva. Un buen líder es capaz de liderar sus propias emociones para luego liderar otras personas.

¿Te gustaría aprender más sobre la Inteligencia Emocional? –> Cómo Alcanzar la Inteligencia Emocional: ¿Es Posible?

Aprendizaje Constante.

Asegúrate de mantenerte en constante aprendizaje, siempre habrá una nueva habilidad o algo que aprender. El aprendizaje es clave para el líder y para sus empleados.

Los empleados sienten aprecio por un líder que apoya su desarrollo profesional. Apoya a tu equipo para que siempre estén adquiriendo nuevos conocimientos que les permitan crecer y sentirse más seguros en su desempeño.

Encuentra un Mentor.

Un buen líder es consciente de sus limitaciones y sabe exactamente en dónde buscar para obtener ayuda. Alguien con mayor experiencia que le permita aprender sobre toma de decisiones, ambiente inclusivo, orientación a los resultados, y cualquier otra debilidad que el líder requiera reforzar.

Ser líder implica una gran responsabilidad para el bien individual y el bien del grupo en general. Es un esfuerzo constantemente por mejorar y mantener un ambiente positivo, además de que su entusiasmo motivará a su equipo y lo mejor de todo es que fomentará la aparición de nuevos líderes

Estilos de Liderazgo

Si bien es cierto que el liderazgo es uno solo, existirán diferentes formas o estilos de desempeñarlo, los tiempos ha evolucionado y de igual manera el liderazgo se ha transformado también. Un buen líder es aquel que inspira a otros a ser mejores y que den lo mejor de sí cada día, veamos los estilos de liderazgo.

  1. Líder tradicional. Es aquel que hereda el cargo por costumbre o tradición. Suele pasar con generaciones de familias.
  2. Líder carismático. Es aquel que tiene la capacidad de generar entusiasmo; sin embargo, centran su liderazgo en ellos mismos. Cuando este tipo de líder no puede estar o se retira, los pilares de su gestión tambalean ya que todo se centra en su carisma o popularidad.
  3. Líder dictador. Aquel que es inflexible, toma todas las decisiones, le gusta ordenar y destruye las ideas de los otros miembros del equipo.
  4. Líder democrático. Acostumbra a ofrecer varias soluciones para que en conjunto con el equipo de trabajo se puedan tomar las más acertadas. Es transparente con la información en general.
  5. Líder transformacional. Utiliza medios no convencionales e innovadores para generar entusiasmo y conseguir los cambios necesarios que generen una mejor gestión.
  6. Neurolíder. Aplica la neurociencia con la gestión de proyectos, incorpora el manejo de habilidades como: el manejo de la actividad del cerebro, procesos mentales, atención y memoria entre otros. Básicamente se centra en entender cómo se toman las decisiones y se resuelven problemas, además de tener altos niveles de manejo emocional y resiliencia.

En mi opinión, será importante destacarnos por un estilo es particular, pero también tener las características que más nos favorezcan de otros estilos; algo así como una mezcla positiva de estilos. Si tu meta es ser un líder que inspire a otros a ser mejores cada día, veamos las características que todo buen líder debe poseer para ser exitoso.

Las 12 características de un buen líder se pueden aprender y trabajar cada día, estoy segura que ya posees algunas de estas características y que puedes reforzar las otras. Estoy segura que tienes la capacidad de ser un mejor líder cada día. Y tú, ¿te consideras un buen líder?