Nadie me quiere, mis relaciones amorosas no funcionan una tras otra, no soy lo suficientemente atractivo, mis finanzas son un desastre, soy muy ingenuo, cometo los mismos errores una y otra vez, odio mi grasa abdominal, soy muy bajo, mi cabello es horrible, mi vida en general es un desastre… ¿Te suena conocida alguna de esas expresiones? Estoy segura de que sí.

Cuando parece que nuestros problemas personales nos agobian, no importa cuál parezca ser el problema, todo radica en que al parecer enfocamos nuestros pensamientos y sentimientos en autocriticarnos cada vez que algo anda mal, en compararnos con un ideal de “belleza” falso que nos impone la sociedad, en castigarnos cuando algo no sale bien, en humillarnos cuando alguien deja de querer estar con nosotros, en maltratar nuestro cuerpo con mala alimentación, alcohol o drogas para huir de nosotros mismos y así vamos por la vida, odiándonos de manera inconsciente y haciendo de nuestra vida una completa miseria.

Desconocer o ignorar nuestro propio valor es una forma de demostrarnos a nosotros mismos que no nos amamos y nos negamos nuestro propio bien. Esas creencias que nos han pasado de generación en generación, que nos adoctrinan en algunas religiones o que hemos formado nosotros mismos o en conjunto con la colectividad, nos llevan a sentir de una forma en particular, una forma que nos hace sentir “mal”.

Dicen que a veces hay que tocar fondo para poder salir adelante, otros dicen que el hombre suele aprender a los golpes, en mi caso personal, fue solo hasta que me vi en la peor noche oscura de mi ser, que me di cuenta de que debía hacer algo para renacer o iba a morir lentamente de depresión. Así fue como comenzó mi camino hacia el crecimiento personal, hacia la autoestima y el hermoso camino de amarme y aceptarme tal como soy. Hoy me gustaría compartir contigo todos los conceptos que descubrí para sanarme y amarme a mí misma. ¡Toma nota!

Pasos para Amarme

Tal como lo mencioné, todo comienza con una creencia y una creencia no es más que una forma de pensar con respecto a algo. Por ejemplo: “Si colocas la cartera el piso, se te va a ir todo el dinero” recuerdo que eso lo decía mucho mi abuela y otras personas allegadas, para ellos eso era una realidad y ¡vaya que lo era! Ya que el universo te demostrará una y otra vez en lo que crees para afirmar tu realidad. Yo en particular siempre coloqué la cartera, morral y cualquier bolsa en el piso y nunca se me fue el dinero. Es simple, yo no creía en ese tipo de creencia limitante. Todo será cuestión de revisar nuestras creencias y transformarlas o cambiarlas por unas que funcionen a nuestro favor, para aprender a amarnos. Veamos algunos ejercicios.

Vigila tus Pensamientos.

En muchas oportunidades, he mencionado que de la manera en que pensamos sentimos; es decir, un pensamiento nos hace sentir de determinada manera. Así que tu tarea será vigilar lo que piensas y cuando te descubras autocriticándote, culpándote, maltratándote, sintiendo dolor, rabia, envidia, inseguridad, resentimiento, celos y otros más; haz un alto y cambia ese pensamiento negativo por algo positivo. Te puedes decir a ti mismo: “¡Alto! Este es un pensamiento viejo y ya no tiene poder en mi vida. Ahora elijo pensamientos positivos y que funcionan a mi favor”.

Revisa tus Creencias.

Es posible que desde pequeño hayas notado como, en casa, en la religión o la comunidad, tengan ciertas creencias que son limitantes o que no funcionan para nuestro bien. Mientras que el colectivo o muchas personas se dejan llevar por pensamientos y expresiones tales como: “es que la situación está difícil” “esto se lo llevó quien lo trajo” “ahora sí es verdad que nos hundimos” “estamos jodidos” ”vamos de mal en peor” yo soy de las que evita ese tipo de comentario y no es que me haga la vista gorda o ignore lo que está pasando; sino que la palabra tiene poder y la palabra viene de una creencia. Así que en la medida que cambiemos nuestras creencias por algo que funcione a nuestro favor, pasaremos a ser los “diferentes” e incluso hablaremos “diferente” porque todo en lo que creemos, pensamos y hablamos será de cosas positivas que co-crearán nuestra nueva realidad, además de evitar la queja a toda costa.

Una vez que te hagas consciente de esto, tu vida cambiará completamente y desecharás creencias limitantes o negativas por otras positivas que funcionen en tu autoestima, crecimiento personal e incluso para tu entorno. Si por ejemplo, en el pasado te dijeron: es que tú no eres tan bonito y agraciado como tus hermanos, puedes comenzar por desechar esa creencia negativa y crear una nueva que alimente tu autoestima, puede ser, soy hermoso y único a mi manera, me amo incondicionalmente. Este es un comienzo positivo.

Elimina la Autocrítica.

 Seguramente has pasado años criticándote por las cosas más mínimas, ahora dime, ¿qué resultados has obtenido? Estoy segura que ninguno porque de lo contrario ya no seguirías criticándote, ¿cierto? Es hora de deshacerte de la autocrítica así como criticar a otros. Deja de maltratarte y empieza a enfocarte en resaltar tus virtudes y aspectos positivos.

Conócete.

Es importante que te sinceres contigo mismo, tengas claro cuáles son tus virtudes y en dónde puedes mejorar. Puedes empezar por hacer una matriz DOFA. Dividirás una hoja en cuatro partes iguales y colocarás una lista de tus: Debilidades, Oportunidades, Fortalezas y Amenazas. Es mucha la información personal que puedes sacar de allí para tu autoconocimiento siempre que seas completamente honesto. Luego analizarás todo de forma imparcial y equilibrada.

Autoestima.

Desarrolla una autoestima sana. Tu labor será ser congruente; es decir, pondrás en sintonía tus nuevos pensamientos, palabras y acciones.

Este tema del autoestima Sana da para un artículo completo, y por supuesto, ya lo he creado para ustedes. Está muy completo, te lo recomiendo –> Cómo Aumentar mí Autoestima: Aprende a Sentirte Bien

Fortalece tu Independencia Emocional.

Muchas veces los apegos nos hacen sufrir, es como saber que algo te hace daño pero eres incapaz de dejarlo. Aprender a soltar te llevará a la independencia emocional y esta es una de las más grandes muestras de amor hacia ti mismo. Una vez que te hagas consciente de que en tus emociones solo mandas tú y quien las dirige eres solo tú, dejarás de sufrir por cosas sin sentido y empezarás a enfocarte en ti y tu crecimiento personal.

La independencia emocional es muy importante, por eso le dedique un artículo entero que te recomiendo leer –> Cómo Eliminar la Dependencia Emocional: ¡Tú También Puedes!

Evita Compararte.

 Recuerda que todos somos únicos y cada quien vino a cumplir un propósito particular. Siempre habrá alguien mejor o alguien peor; sin embargo, la única comparación o competencia es contigo mismo, superar a ese que fuiste ayer es la mejor recompensa de todas.

Elógiate.

Nada como reconocer tus virtudes y decírtelo a ti mismo. Cada vez que hagas algo bien, dedícate unas palabras de reconocimiento. Incluso puedes ir al espejo y decirte lo orgulloso que estás de ti mismo y todos tus logros.

Acéptate.

Con lo bueno y lo malo, con tus luces y tus sombras. Lo importante será integrar ambos aspectos y convertirte en tu mejor versión. Eres único y eres maravilloso. Muchas veces nuestra sociedad de consumo nos vende estándares de belleza, éxito y “felicidad” irreales y distorsionados que no necesariamente se ajustan a lo que en realidad necesitamos para aceptarnos y amarnos.

Establece Límites.

Todos tenemos la oportunidad de mejorar; sin embargo, cuando estás claro y en orden con tus sentimientos, debes evitar ser condescendiente con opiniones de otros sobre ti o peor aún, evita sentirte mal con sus comentarios. Ya sabes lo que vales y que te importe una m-$#@ lo que digan o piensen de ti.

Desarrolla un Estilo de Vida Saludable.

Tomar consciencia de cómo nos alimentamos, ejercitamos y cuidamos de nuestro cuerpo es una muestra de profundo amor propio. Mientras más te cuides, más tu cuerpo te lo agradecerá y retribuirá con salud y energía.

El día en que impartan en las escuelas una materia obligatoria sobre el amor propio, la autoestima y el desarrollo personal; será el fin de tanto sufrimiento. Entender que nuestro gran amor somos nosotros mismos, que todo comienza y termina en uno mismo es de vital importancia para relacionarnos con otros. Es muy común buscar el amor por fuera, solemos decir: “quiero alguien que me ame de verdad, que me valore y me aprecie” cuando en realidad no podemos buscar el amor por fuera; solo hasta que tú mismo te des amor, es que el universo te reflejará amor. No puedes esperar a que venga otro a darte amor, a decirte que te valora, que te aprecia o decirte que eres importante. Eres tú quien tiene que conectar el amor contigo mismo, eres un ser completo y no dependes de nadie para esperar por ese amor. Recuerda que el amor ya está en ti solo tienes que hacerte consciente de eso. Un abrazo del alma. ¡Saludos!