¿Cuántas veces te asomaste por la ventana y al notar que estaba lloviendo, te molestaste o tu humor cambió? ¿Cuántas veces tu mejor amiga amaneció de malas pulgas y, automáticamente, tú también te pones de malas? O ¿tu pareja decide molestarse por una tontería e inmediatamente tú te angustias y también te molestas? Si esto te pasa con frecuencia, es posible que tengas dependencia emocional. El que nuestras emociones cambien dependiendo de los factores externos que nos rodean, dependerá de un buen manejo o no de nuestras emociones. Sigue leyendo para aprender a identificar la dependencia emocional.

¿Qué es la Dependencia Emocional?

Según la psicología, la dependencia emocional o afectiva, radica en comportamientos sentimentales adictivos y una necesidad de afecto desproporcionada hacia alguien. Una persona con dependencia emocional convertirá la necesidad de afecto que todos tenemos en medidas desproporcionadas o extremas. Sin embargo, la dependencia emocional es una conducta que se va desarrollando con el tiempo, veamos cuáles son las causas.

Causas de la Dependencia Emocional

La dependencia emocional se origina por traumas en la niñez que tendrán que ver con  necesidades de afecto no satisfechas, son personas emocionalmente inmaduras y han desarrollado la manipulación y el apego de forma desmesurada. Ahora bien, la dependencia emocional se puede dar de dos formas:

  1. Dependencia vertical. Donde una persona depende completamente de otra. Como es el caso de los bebés que dependerán exclusivamente de sus padres para poder vivir.
  2. Dependencia horizontal. Se da entre personas adultas, los involucrados darán y recibirán, se apoyarán de forma equilibrada.

El problema de la dependencia emocional se origina en llevar patrones de dependencia vertical a relaciones entre adultos, así pues se pueden dar dos tipos de personas dependientes: personas con la necesidad de que otros los cuiden, mantengan y provean o por el contrario, se darán personas que busquen a quien “salvar” o dominar.

Se puede decir entonces que dentro de las causas de la dependencia emocional, podemos encontrar personas que tienen un rasgo marcado en la adultez de buscar un padre/madre o ser un padre/madre. Increíble pero es más común de lo que se cree ver en relaciones de pareja este tipo de rasgos; bien sea un hombre que trata de conseguir una madre en una esposa o una mujer que trata de hallar un padre en un esposo. Más abajo te daré los rasgos que determinan a una persona emocionalmente dependiente, vamos a revisarlos.

Rasgos de una Persona con Dependencia Emocional

Desde pequeños, cuando se nos presenta X o Y situación, nos acostumbramos a ver la reacción de mamá o papá para saber cómo comportarnos. Por ejemplo, a un niño se le cae un plato de vidrio, su reacción primaria será asustarse pero luego buscará a su alrededor una figura de autoridad que le dé una referencia de cómo comportarse ante lo sucedido. Si mamá o papá se muestran enfadados y de paso lo regañan, entonces el niño llorará y se irritará; pero si mamá o papá se muestran calmados y explican que eso puede suceder pero hay que tener más cuidado, entonces el niño se calmará y seguirá con sus actividades. Ya de adultos y de alguna manera cuando algo nos sucede, miramos a nuestro alrededor para saber cómo reaccionar, Entonces es justamente así es como aprendimos a dejar que nuestras emociones dependieran de los factores externos. Con el paso de los años, vamos madurando emocionalmente y autorregulamos nuestras emociones; pero ¿Qué pasa cuando una persona queda atrapada en esa eterna niñez emocional? Vamos a identificar las características típicas de una persona adulta con dependencia emocional.

  1. Su estado de ánimo dependerá de cómo lo trate la otra persona.
  2. Evita llevar la contraria para no generar enfrentamientos.
  3. Miedo desproporcionado a perder a la persona querida.
  4. Es objeto de chantajes y manipulación emocional.
  5. Sufre de sentimientos de culpa si la otra persona está mal.
  6. Sentirá la necesidad de tener el control sobre todo lo que hace la otra persona.
  7. Se aísla socialmente.
  8. Antepone las necesidades de la persona amada antes las suyas.
  9. No disfruta de otra cosa que no sea estar con la persona querida.

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Si te sientes identificado con la mayoría de estas características, muy probablemente este frente a un caso de dependencia emocional. La buena noticia, es que podemos eliminar las dependencias emocionales y hoy te quiero explicar cómo hacerlo.

¿Cómo Mejorar y Superar la Dependencia Emocional?

¿Quieres eliminar tu dependencia emocional? Lo primero que debo recordarte es que nadie puede hacer por ti lo que solo tú debes hacer, en este punto será importarte que mires hacia adentro, reconozcas a ese niño herido que hay en ti y empieces a darle toda la atención que necesita. Lo ideal será establecer relaciones inter-personales en lugar de depender.

Madurar emocionalmente, consiste en desarrollar lazos sanos con otras personas. En donde todos den y reciban de la misma forma. También será importante que tomes en consideración lo siguiente:

Autorregulación.

Es la capacidad de regular tus estados de ánimo por ti mismo. Las actividades que puedas realizar solo tú serán claves, como por ejemplo, hacer algún deporte, hacer un taller, meditar, pasear por un parque, leer y así.

Te invito a conseguir actividades que te gusten y disfrutes sin necesidad de aprobación de un tercero, esto ayudara a ganar auto confianza e ir eliminando la dependencia emocional.

Co-regulación.

Es cuando buscas ayuda para regular tus emociones, bien sea un amigo o un terapeuta que ayuden a regularte. Siempre recomendamos a un especialista para que te escuche y te oriente personalmente.

Trabajar tu autoestima.

Es importante que le des fuerza a tus aspectos positivos, trabajes en tu autoconocimiento y evites compararte con otros. La clave de una autoestima sana es actuar en congruencia con lo que piensas, dices y haces.

Si logras congruencia, ganaras confianza en ti mismo y en tus decisiones. Con esa confianza en ti mismo podrás ir eliminando tus dependencias emocionales.

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Disfruta de momentos a solas.

Tú eres la única persona que vive y piensa en ti, así que estar un tiempo a solas te permitirá reencontrarte. Una vez que domines eso de estar tiempo a solas, lograrás bajar los niveles de ansiedad por estar siempre con la persona querida.

En alguna oportunidad para eliminar mi propia dependencia emocional hacia un chico, me funcionó de maravillas irme de viaje sola por un fin de semana, es como volver renovada.

Auto-reconocimiento.

Observa tus necesidades, vacíos, carencias y determina cómo puedes llenarlas solo tú, sin necesidad de volcar tus sentimientos hacia otras personas.

Conocerte a ti misma y reconocer lo que quieres es muy importante para librarte de tu dependencia emocional.

Hacernos cargo de nuestras emociones radicará en la capacidad de autorregularnos, solo de esta manera lograremos estar conectados con lo que nos rodea pero sin dejar que los factores externos nos afecten. Es desarrollar una madurez emocional que a su vez nos dé autonomía para expresarnos sin mirar a papá o mamá. ¡Saludos!